Mateo Mendía integró el plantel de Boca Juniors que el pasado sábado obtuvo la Copa Intercontinental Sub20 y consumado el triunfo, pasados los festejos y de vuelta a la cotidianeidad de la semana, habló con Infoeme.
“Todo lo del sábado fue una locura, se vivió un momento único y es lo que puedo decir de lo que pasó”, recordó Mateo Mendía sobre la consagración “Xeneize” en La Bombonera al derrotar por penales a AZ Alkmaar de Países Bajos y agregó´: “Sentir cada momento fue una alegría, pero ahora ya pasó, volvimos “a la oficina” y hay que pensar en lo que viene ya sea con la categoría o con la Reserva”.
El defensor oriundo de Loma Negra aseguró que “me preparé mucho para poder estar en la lista de esta final tan linda que fue una oportunidad única porque antes de que empezara la Copa Libertadores me lesioné y no me dio el tiempo para poder ser parte”.
“Entrando por el túnel y escuchando el aliento de la hinchada se te cruzan millones de cosas por la cabeza, pero tenés que estar enfocado porque por delante teníamos un partido más que importante”, aseveró el olavarriense sobre la final que se llevó a cabo en La Bombonera y ante más de 40.000 personas: “Lo de la gente fue único, no nos imaginábamos que iba a ir tanta gente, se llenó y no nos quedaba otra que disfrutar el momento de estar ahí”.
“Estamos en un buen nivel y con un envión anímico importante después de la Copa, le tenemos que meter para terminar primeros en todo lo que podamos porque estamos en un gran club”
El también hincha del club de La Ribera manifestó que “ser hincha de este club y tener toda esta gente que te banca fue hermoso, una experiencia única” y agradeció los muchos mensajes que le llegaron desde la consagración desde “mis amigos que varios vinieron a verme, mi familia que también estuvo, la gente de Loma Negra y también los chicos que están en otros clubes de AFA luchando por el mismo sueño. Me parece que tanto afecto me llena más que la Copa en sí”.
Su familia, sus deseos y un trabajo diario para cumplir un sueño
Habitual titular en Cuarta División, donde marcha líder, y alternando presencias en Reserva, Mendía sostuvo: “Jugar en Boca es un mimo enorme y se valora muchísimo, por eso este título es la recompensa a todos los años que venimos haciendo sacrificios con mi familia y por lo que trabajo todos los días”.
A cientos de kilómetros de su casa en Villa Alfredo Fortabat, el representante local que llegó a Boca Juniors en 2016 sostuvo que su familia es su pilar fundamental: “Papá -NdR: el entrenador y captador de la Academia Mascherano Hernán Mendía- es mi docente, me habla como un entrenador, me corrige millones de cosas y mi vieja ahora está recontra metida en el fútbol”.
Sin embargo, con los pies sobre la tierra por el futuro inmediato, “Mate” afirmó que en esta temporada donde “estoy intercalando” entre su divisional y la División Reserva “hay que bancar y si estoy adentro dar lo mejor para ser campeón porque Boca se lo merece”.
“Riquelme siempre nos banca y eso es una presión porque nos sigue el último 10, como muchos dicen”
Por último y sin olvidar dar un mensaje de aliento a los futbolistas en formación de la Ciudad de la importancia de “laburar cada día para llegar a cumplir el sueño”, el jugador que habita en la pensión sentenció: “Espero jugar en Primera, ojalá sea lo más pronto posible, pero para eso hay que ganárselo día a día, dar pasitos de a poco y hay que meterle para poder el salto”.