A veces la cotidianidad nos hace pasar por alto varias “joyitas” que se ubican en los lugares en los que vivimos. Además de los puentes colgantes y las calles anchas, llama la atención en Olavarría la réplica de la Estatua de la Libertad. Muchos pasan a diario por delante de ella sin percatar en el porqué de su ubicación en nuestra ciudad, a miles de kilómetros de la original.
La Estatua de la Libertad es uno de los monumentos más famosos del mundo. Inaugurada en 1886, se ubica en Nueva York, en los Estados Unidos. Fue un regalo del pueblo francés al estadounidense para celebrar el aniversario de la Declaración de la Independencia. Se ha convertido, con el paso del tiempo, en símbolo de la libertad y la emancipación.
En el caso olavarriense, la réplica de la Estatua de la Libertad fue inaugurada en 1970 en Almirante Brown y la avenida Colón. Pero, ¿por qué se emplaza en nuestra ciudad? La respuesta es simple: la colectividad francesa la donó al Municipio. Se encuentra hecha en piedra, sobre una base de granito, extraído de la localidad.
Guardando las proporciones de la original, la réplica olavarriense también se ha convertido en el centro de las luchas por la libertad. Ha sido epicentro de varias de las Marchas del Orgullo LGTBIQ+.
En noviembre del año pasado, la Sociedad Francesa de Olavarría realizó un acto en el que se produjo la reinauguración de tan distinguido monumento. En aquel entonces, se llevaron a cabo mejoras en la misma, como el cambio de la antorcha y la luminaria.
Pero Olavarría no es la única ciudad de Argentina ni de la provincia de Buenos Aires que cuenta con una réplica de la mítica estatua estadounidense. Desde la Embajada de Estados Unidos en Argentina han encontrado un total de 6 en todo el país: la Ciudad de Buenos Aires, Pocitos, General Pirán, Munro y General Rodríguez.