A pesar del parate por la pandemia de COVID-19 y de varios meses de entrenamientos en el hogar, Daiana Moura volvió a las prácticas en Córdoba donde se instaló para intentar lograr la clasificación a los Juegos Paralímpicos de Tokio 2021.
“Nunca se me habían dado condiciones de entrenamiento tan buenas en mi carrera deportiva” comenzó diciendo la deportista paralímpica que previo a instalarse en Córdoba entrenaba a distancia con Costanza Quellet y “de entrenar prácticamente sola y a la distancia, pase a entrenar 5 veces por semana en el agua con la presencia de mi entrenadora”.
La olavarriense confirmó que entrena para intentar lograr la clasificación a los Juegos Paralímpicos pero que “en este momento no hay ninguna fecha de clasificación confirmada, pero podamos aprovechar a corregir cuestiones técnicas que antes no podíamos. Eso hace que se mejore la eficiencia de nado y se note después al momento de la velocidad”.
“Me demoré un poco para venir porque no me salían los permisos, necesité un permiso nacional de circulación que tenemos los deportistas en búsqueda de la clasificación que nos exceptúa del aislamiento y otro de la provincia de Córdoba, además de un certificado de un hisopado negativo” contó quien viajó en el pasado agosto pero que recién el 11 de septiembre pudo volver a entrenar.
Pero no sólo el entrenamiento cambió para la olavarriense, su arribo a Córdoba Capital se produjo en una circunstancia especial: “Después de volver de Lima y mientras esperaba el micro para ir a Olavarría, me encuentro con una señora que casualmente nos tocaron asientos vecinos; ella me dijo que si un día tenía que volver podía quedarme en su casa y ahora cuando fue momento de llenar los permisos nos dimos cuenta que iba a ser más fácil estar acá y sin saber si seguía teniendo el mismo número, me contacté y le pregunté si seguía en pie su ofrecimiento a pesar de las condiciones, me dijo que sí y hace dos meses acá estoy” recordó.
“No hace a lo deportivo pero es para destacar esta acción solidaria, porque no cualquiera recibe a una persona que apenas conoce en su casa y menos con una discapacidad sabiendo que sí o sí va a haber cosas con las cuales me va a tener que asistir” resaltó la abogada y se mostró por demás agradecida con Alicia Wihelm porque “influye en la posibilidad de que logre mi objetivo”.
Respetando los protocolos, firmando diariamente una declaración jurada y con una familia que la recibió como una integrante más, Daiana Moura sigue trabajando para tratar de cumplir el sueño olímpico.