Dos nuevos allanamientos se llevaron a cabo el último miércoles por la tarde en el marco de la causa que investiga la desaparición Carlos Cordero, mientras aún se aguardan los resultados de los cotejos de ADN para determinar si el cuerpo calcinado hallado días atrás detrás del santuario del Gauchito Gil se corresponde o no con el del ex militar de 60 años.
Los allanamientos estuvieron a cargo de la Sub DDI Olavarría y contaron con colaboración de la división canes de rastreo, Policía Científica, Policía Local, Jefatura Distrital y sus distintas dependencias.
Pese a la escasa información que trascendió hasta el momento, se supo que en los procedimientos realizados en dos domicilios del barrio Coronel Dorrego se secuestraron nuevos elementos de interés como prendas de vestir, teléfonos celulares, entre otros.
La investigación está a cargo de la UFI 4 de Olavarría, a cargo de la fiscal Paula Serrano.