El 28 de julio se conmemora el Día Mundial contra la Hepatitis bajo el lema “Es tiempo de actuar”, con el objetivo de concientizar a toda la población sobre una de las enfermedades infecciosas virales más frecuentes.
La hepatitis es una inflamación del hígado, provocada en la mayoría de los casos por un virus – hepatitis A, B y C -.
Las hepatitis virales pueden ser asintomáticas. Por eso son tan importantes los controles periódicos para diagnosticar la enfermedad a tiempo, iniciar un tratamiento oportuno y evitar la transmisión.
La única forma de detectar las hepatitis virales es mediante análisis sanguíneos específicos, para lo cual sólo se necesita una simple extracción de sangre. Los testeos se realizan de manera gratuita en hospitales y centros de salud a nivel nacional.
Las hepatitis A y B son prevenibles con vacunas (por eso es tan importante mantener completos los esquemas de vacunación según Calendario Nacional). Los tratamientos para la hepatitis B crónica y para curar la hepatitis C, son seguros y altamente efectivos.