La ciudad de Mar del Plata cerró el lunes con tres episodios delictivos graves ocurridos entre las 20 y las 22, que dejaron muerto, un herido de bala, y otros dos agredidos por ladrones, dando cuenta de la escalada que alcanza la inseguridad en la localidad balnearia.
En el primer evento, un hombre y su pareja fueron sorprendidos por dos “motochorros” en la intersección de las calles 11 de Septiembre y Salta, cuando arribaban en su auto a su casa. A punta de pistola, los ladrones obligaron al conductor a bajar del coche, un Peugeot 308. En circunstancias que son materia de investigación, uno de los ladrones abrió fuego contra el hombre, quien sufrió heridas en un brazo y en una pierna. Rápidamente el malviviente abordó el vehículo y escapó, al igual que su cómplice, quien lo hizo en la moto en la que se movilizaban.
El hombre herido fue trasladado al Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), donde los médicos le realizaron las curaciones y dispusieron que permaneciera internado en observación. En tanto, personal de la comisaría primera realizó los peritajes correspondientes junto a la Policía Científica, en el marco de una causa judicial cuya investigación quedará a cargo de la fiscal María Constanza Mandagarán.
El segundo de los episodios, según informó La Capital de Mar del Plata, se produjo casi al mismo tiempo, en la calle Larrea al 1800, donde un policía fue asaltado por “motochorros” y, tras identificarse y extraer su arma reglamentaria, disparó para ponerlos para que se dieran a la fuga. El agente dio aviso de lo que había ocurrido a través de un llamado al Servicio de Emergencias 911 y se presentó en el lugar personal de la comisaría segunda, que tiene jurisdicción allí, que notificó a su vez a la fiscal Mandagarán.
Cerca de las 22, en el hecho más grave de los tres, delincuentes ingresaron en una vivienda de Don Orione al 2300 y balearon a dos hombres, padre e hijo, quienes fueron trasladados de urgencia al HIGA.
El mayor, identificado como Matheo Bonifacio Sánchez, de 63 años, murió en el sanatorio minutos más tarde, producto de las severas lesiones sufridas en el ataque, mientras que el menor permanece internado con un disparo en el abdomen y otro en la pierna. Los delincuentes lograron huir, mientras que policías de la comisaría quinta la propia fiscal Mandagarán iniciaron las actuaciones penales correspondientes. (DIB)