En los rastrillajes realizados en la tarde de este lunes en el barrio Nicolás Avellaneda buscando a Lucas Simón, joven de 22 años que desapareció el pasado domingo de su casa, la familia del joven dialogó con Infoeme y manifestó su preocupación y desesperación por no tener absolutamente ninguna información del joven.
Melisa, prima de Lucas, dijo que el joven vivía con ellos, y que “el domingo a la noche que faltó nos pareció raro porque se había ido temprano, antes que nos levantemos, no estaba la bici”. Confirmó que “salió sin documentos, sin dinero, y con la ropa de andar, una bermuda y una remera negra”. Entre las pistas arrojadas sobre su posible paradero “nos dijeron que lo vieron en Racing el día del partido afuera de la cancha, fuimos y nada. En Azul y nada. No sabemos qué más hacer”.
Su prima, tal como su amiga Johanna y su madre Gladys coincidieron en que Lucas “es un chico muy tranquilo, súper sano. No tiene adicciones, no tiene problemas con nadie. De hecho todas las personas a quienes les tomaron declaración en el barrio les dijeron que era un chico bueno, respetuoso. Es un chico que si se iba a algún lado nos decía. Si no venía nos mandaba un mensaje”.
“Ese día se hicieron las 22 y hablábamos con mi familia de que Lucas no apareció en todo el día, le mandé un Whatsapp, le quedó un tilde solo, lo llamamos y nada. No vimos nada raro, nada que nos pueda llamar la atención”.
Gladys Mabel Simón, madre del joven, indicó a este medio que “es anormal lo que estamos viviendo, Lucas nunca se comportó de esta manera, es un chico tranquilo, respetuoso, buena persona, de buenos modales. Siempre que salió avisó. Nos sorprende enormemente que haya desaparecido de pronto, sin avisar”.
Bajo una profunda conmoción y visiblemente emocionada, la madre del joven admitió que “estamos cada día más desesperados, termina el día y es pasar otra noche sin Lucas. No sabemos absolutamente nada todavía”.
De todas maneras, dijo que “se avanzó un poquito más, vemos que todo es muy lento. Esperemos tener buenos resultados, que Lucas aparezca sano y salvo, que podamos volver a abrazarlo, y bueno, como madre la desesperación no se puede poner en palabras. Este silencio de llamar a ese celular y ni siquiera recibir una contestación, ni de un mensaje, una llamada, nada. Está el teléfono mudo y no tenemos demasiada información para ver con quien se contactó. Creemos que las respuestas pueden estar en ese celular”.
“Seguimos esperando y todos abrazados a que Lucas vuelva” finalizó.