Hace 15 años dejó Olavarría, se radicó en España y encerrada en su hogar en Cataluña, Esther Ayala Chombón se comunicó con Infoeme.
Pasando los primeros días de desescalada en el suelo español, la oriunda de Olavarría que vive en Tarragona en cercanías del rio contó “el inicio a la vuelta a la normalidad se divide en etapas y cada fase por edades para poder salir, pero es obligatorio salir con mascarillas y quienes no cumplen enfrentan multas”.
“No he salido para nada porque tengo elementos de supervivencia comprados con antelación unos días antes que comenzara la cuarentena y me permite seguir confinada sin salir a pesar de que van 10 semanas de confinamiento” agrega Esther Ayala Chombón que al igual que el resto de los ciudadanos de España se muestran optimistas con los números oficiales de los infectados en los últimos días por el virus del COVID-19.
Tras más de dos meses de cuarentena obligatoria, España ha mostrado una situación alentadora ya que bajaron los números de infectados por el coronavirus y los recuperados se acercan a los 130.000.
“La situación poco a poco remontará pero el Ministro de Salud ha expresado que es imprescindible seguir disponiendo del estado de alarma y que no debemos perderle el miedo al virus”
Trabajando en el área de turismo, una de las más afectadas a nivel mundial, la olavarriense espera “durante este mes, recuperar un poco la vida casi normal como antes y digo así porque no será lo mismo para nadie. Tenemos un antes y un después del coronavirus, nuestro enemigo invisible porque sabemos que esta y no lo vemos, como el viento”.
Contando que “he estado como voluntaria para salvar aves, peces y costas en el mar”, Esther Ayala Chombón destaca para cerrar el trabajo de desinfección constante por parte de las autoridades y también cómo la sociedad cumple con la distancia social en una de las tantas ciudades portuarias de España.