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Las estadísticas afirman que hay menos conductores alcoholizados al volante, conductores que incumplen con la normativa que prevé hasta un 0.5 g/l de nivel de alcohol en sangre. Sin embargo “Paralelamente crecieron en un 20% los casos que dan positivo, aún por debajo del nivel permitido por la ley en un conductor particular”, lo dijo Gonzalo Bagú.
El problema sigue siendo la seguridad vial que año tras año es la causa principal de muerte en el país. A pesar de la intensificación de los controles viales, Gonzalo Bagú - Director Nacional de Coordinación Interjurisdiccional de la Agencia de seguridad vial- explicó que “Cuando nosotros estamos comparando los datos de alcoholemia con este principio de 2015 con el principio de 2014, mes a mes, lo que notamos es que hay una baja en los casos de alcoholemia positiva”.
“NO HAY MENOS CONDUCTORES CON ALCOHOL EN SANGRE”
De estos datos se desprende el más significativo, el que subyace a estos números que parecen tan efectivos. “Por un lado nos podemos quedar sólo con el dato que bajaron los casos positivos, pero en realidad cuando vos analizas todo el problema, fue más el aumento de casos positivos de alcoholemia que no son plausibles de sanción. –Los que están por debajo del 0.5 g/l - Fue más grande ese aumento, que el descenso de los que superan el nivel de alcohol en sangre, es decir, los plausibles de sanción por encima del 0,5 g/l “, explicó Bagú quién responde al frente de la Agencia de Seguridad Vial que depende del Ministerio del Interior y Transporte dirigido por Florencio Randazzo.
La Agencia de Seguridad Vial de nuestro país se creo en el año 2008 tomando como modelo el utilizado en España “fundamentalmente por una cuestión cultural” afirma Gonzalo y resalta que “fue destacada por la ONU”. Es un ente autárquico y con estructura propia, con presupuesto genuino. El referente de esta agencia destaca este punto al explicar que “El presupuesto de la agencia se nutre de la cantidad de autos que hay asegurados en la argentina. El 1% del valor del seguro que uno paga por su auto, es el presupuesto que nutre a la agencia de seguridad vial. Y además va creciendo porque como cada vez aumenta más el parque automotor y así también las pólizas del seguro, el presupuesto sube año a año”.
“TENEMOS MÁS VICTIMAS FATALES EN LAS CIUDADES QUE EN LAS RUTAS”
Para finalizar es importante resaltar que a pesar del imaginario colectivo que cree que las vidas se quedan en las rutas, el Director Nacional de Coordinación Interjurisdiccional resalta las estadísticas de las Naciones Unidas que indican que “en 5 años con el crecimiento del parque automotor, a razón de prácticamente 1 millón de vehículos más por año descendieron un 20 % las víctimas fatales en Argentina por siniestros viales y concretamente, en rutas nacionales que es nuestra jurisdicción directa, el descenso fue del 50%” . En principio aunque estos números parezcan contradictorios, la explicación continúa “Estos números son así porque tenemos un problema distinto en Argentina, tenemos más victimas fatales en las ciudades que en las rutas. Y Esta situación se viene dando desde hace 2 años, la hipótesis más clara que explica esto y sobre la que estamos trabajando, es la enorme proliferación de motos de baja cilindrada”, otro punto importante dentro de la problemática que se suma al difícil entramado del tránsito y la seguridad vial.
“TOLERANCIA CERO”
Definitivamente la propuesta frente a cuánto afecta el alcohol a la hora de manejar, deviene en un proyecto que se volverá a presentar por parte del randazzismo cuando se retomen las sesiones ordinarias en el congreso de la nación, que tiene como eje fundamental la “Tolerancia Cero”, para así “disociar de forma definitiva el alcohol del volante” cierra contundente Gonzalo Bagú en comunicación con Infoeme . Porque a pesar de los números que hablan de una baja en el consumo que infringe la ley “El alcohol sigue presente, evidentemente hay un cuidado para no ser infraccionado, hay cierto autocontrol pero no hay menos conductores con alcohol en sangre. Vemos que hay cierto cuidado frente a los controles. Por más mínima que sea la presencia de alcohol en sangre, afecta la capacidad de atención del conductor. Se triplica el riesgo de sufrir un siniestro vial”.
Son siniestros, justamente, porque se pueden extremar las medidas para evitarlos. En palabras del titular de la agencia de seguridad vial “un accidente es que te caiga un meteorito en la cabeza”, estas son situaciones de siniestros viales, que por no usar cinturón, por ir hablando por teléfono o por conducir con algún grado de alcohol en sangre, se pueden evitar.