------------------------------------
El reconocido ex piloto nacional Juan María Traverso estuvo en la ciudad de Olavarría, en una charla de conciencia vial, organizada por el Director de Control y Fiscalización Vial, Gonzalo Bagú, junto a la agrupación Estrellas Amarillas y Adepp.
El evento se desarrolló este jueves en el Club Pueblo Nuevo ante más de 200 personas que se reunieron para escuchar la voz del multicampeón de Turismo Carretera y TC2000, que se caracterizó en sus años como piloto por sus explosivas declaraciones y su manejo hábil dentro de la pista.
El primero en hablar fue Gonzalo Bagú, quien agradeció la presencia del público, y el acompañamiento de Estrellas Amarillas y la agrupación Adepp.
Luego tomó la palabra Traverso: “Vengo de un automovilismo que allá por los 70, cuando empecé a correr, era muy peligroso. Yo me despedía efusivamente de mis viejos, porque me iba para no volver. Luego lo hice también con mis hijos. El automovilismo me enseñó lo fácil que es tener un accidente y perder la vida. Y entonces nunca me permití no volver a mi casa por pegarme ‘una piña’ en la ruta por venir boludeando. Tengo millones de kilómetros viajando por las rutas del país y nunca me pegué una piña. Voy a la velocidad que corresponde, voy atento, voy manejando. No le permito a ese celular de mierda que me mate”.
“Discuto con la Agencia Nacional de Seguridad Vial porque yo soy partidario del alcohol cero, y está permitido 0.5”, fue una de las declaraciones el piloto, al señalar al alcohol como uno de los principales factores que provocan los accidentes de tránsito.
Al momento de hablar de las motos, puso especial énfasis en el uso del casco, que, según él, es el elemento primordial para la circulación en estos vehículos, “el casco y la moto son una sola pieza. La moto es el mejor invento que se hizo para perder la vida. No me entra en la cabeza un tipo que anda en moto y no usa el casco”.
Luego la charla tuvo un importante ida y vuelta con los oyentes, quienes hacían sus preguntas y Traverso contestaba, al mismo tiempo que en una pantalla se proyectaban imágenes de accidentes fatales, señales de seguridad vial y prevenciones a la hora de salir a la ruta. “Las rutas argentinas están saturadas de tránsito y en mal estado, se trabaja permanentemente. Las reconstruyen todo el tiempo. Pero todos las vemos cuando viajamos, sabemos como están las banquinas, las rayas amarillas despintadas y concientemente no hacemos nada, porque decimos ‘si me mato no es culpa mía’. Todos vemos los distintos problemas y no le queremos dar pelota”, recriminó el ex piloto.