El municipio local, informó sobre el desarrollo de procedimientos de rutina por parte de la Dirección de Bromatología.
En ese marco de control a transportes de sustancias alimenticias, se detuvo a una camioneta Chevrolet S-10, cuyo conductor se encontraba transportando aves evisceradas en la caja de la misma.
En la zona de carga de dicho vehículo, se comprobó que los alimentos eran mal transportados, sin poseer resguardo alguno.
Comunicaron oficialmente que se comisó 300 kg de aves evisceradas. La camioneta, no contaba con habilitación municipal y en la mercadería transportada se detectó corte de cadena de frío, indicando en aves enteras 5ºC (máxima admitida 2ºC).