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Fuente: www.OlaBasquet.com.ar
Ferro volvió a festejar en el clásico local y se coronó campeón del Clausura de la ABO luego de vencer categóricamente a Pueblo Nuevo en su casa por 96 a 78 en el tercer juego de la serie final.
Los dirigidos por Cristian Sánchez habían sido los mejores en la temporada regular así como también se quedaron con el “1” en la Zona Sur del Torneo Provincial. Pero con Ferro son partidos a parte y se juegan de otra manera. El Carbonero así lo hizo, y dejando el alma en cada bola y además jugando en alto nivel, se quedó con la final sin dejar dudas y hasta con cierta comodidad.
El encuentro de este lunes comenzó siendo favorable para el Lobo. Aprovechando su mayor peso en la pintura vía Barrera (6) sacó una buena diferencia. Pero Ferro de a poco se fue metiendo en el partido y con los triples de Pietrafesa (3 en el cuarto) niveló las acciones.
En el segundo la levantada de la visita continúo gestándose desde tercera dimensión. Briones, Santana, Sansimoni, Debiasi y Álvarez castigaron desde más allá de 6,75 y así su equipo llegó a la abultada suma de 10 triples en la primera mitad, la cual terminó ganando 46-41.
En el tercero se esperaba una reacción del local, favorito para esta final, que cuenta con individualidades que te dan vuelta un partido en un abrir y cerrar de ojos, pero eso no ocurrió. Fue todo lo contrario, Ferro salió a matar y con un parcial de 11 a 0 en 3 minutos sacó la máxima hasta allí (57-41).
La defensa zonal plantada por Sánchez (tal vez para recuperar fuerzas en un equipo cansado) era una invitación a tirar y con otras 5 bombas Ferro fue torciendo el rumbo de la final para su lado. Una pequeña luz de esperanza se encendió tras 3 corridas seguidas que significaron un 6-0 para el local en 1 minuto y ponerse a 9 de distancia. Pero Ferro se escapó nuevamente y cerró el parcial con holgura.
En el último periodo Arce y Barrera tiraron de un Pueblo Nuevo cansado y corto (ingresaron 7 jugadores) pero no alcanzó. Ferro se mostró más entero, más largo y con variantes en ataque. Circuló bien la bola, los espacios aparecieron y festejó antes de tiempo su merecido título de Campeón del Clausura de la ABO.