La Justicia de Entre Ríos confirmó que los restos humanos encontrados en un descampado de Concordia pertenecen a Luisina Leoncino, una joven de 24 años desaparecida desde el 9 de julio. En relación a este caso, hay un acusado en prisión preventiva que cuenta con antecedentes penales. Es importante destacar que en marzo de este año, la hermana de Luisina también fue víctima de un femicidio, siendo asesinada a tiros en la puerta de su casa por un compañero de trabajo.
Aunque la prueba de ADN aún no está disponible, un médico forense del hospital Felipe Heras confirmó el tatuaje distintivo que la joven tenía en el lado derecho del pecho. Según informó José Costa, coordinador del Ministerio Público Fiscal de Concordia, a Télam, fue gracias a este tatuaje que se pudo identificar a la víctima.
Los restos fueron descubiertos recientemente cerca de un arroyo en el barrio Pampa Soler. Las investigaciones, basadas en análisis de filmaciones y registros telefónicos, llevaron a sospechar que Horacio Rafael Benítez, conocido como "El Ñoño" y único imputado y detenido por el femicidio, los había arrojado allí.
La investigación se centró en "El Ñoño", luego de la declaración proporcionada en el expediente por un conductor de remis que relató que en la madrugada del lunes 10 de julio llevó a Luisina a una casa ubicada en la calle Santos Vega al 1.200, en el barrio 6 de febrero.
Según el fiscal, las cámaras de seguridad registraron su entrada, pero no se registró su salida.
Benítez fue captado por las cámaras saliendo de la casa con bolsas negras y protegido con guantes y un casco para ocultar su identidad. Tras ser interrogado por la Justicia y debido a las inconsistencias, dudas y ciertas actitudes, el juez de Garantías de Concordia, Germán Dri, dictó su prisión preventiva por un período de 90 días al considerar que se ha demostrado su participación en el incidente.
El fiscal también informó que aún no se determinó "qué relación tenían" el acusado y la víctima, pero adelantó que durante esta semana se investigará a través de "cámaras, teléfonos móviles, testimonios de personas cercanas y resultados de pericias y búsquedas exhaustivas" realizadas en la residencia del sospechoso para obtener más información sobre lo sucedido.
Luisina era hermana de Valeria Leoncino (25), una joven que también fue víctima de femicidio. Valeria fue asesinada hace menos de cinco meses, la noche del lunes 6 de marzo último, de tres balazos en la puerta de su vivienda por un compañero de trabajo obsesionado con ella, quien posteriormente se suicidó.
El femicidio ocurrió en un complejo de departamentos en la calle Guarumba, entre Eva Perón y Entre Ríos, en Concordia. La víctima se encontraba con unas amigas a las que había llamado después de ver a Carlos Passarella (34), compañero de trabajo, apoyado en su auto Ford Fiesta blanco frente al edificio.
Según el fiscal de Género local, Mauro Jaume, Passarella y Leoncino "eran solo compañeros de trabajo y no tenían una relación sentimental o de pareja. En cambio, había una obsesión por parte del joven hacia la chica".
Según las amigas de Valeria, el hombre mostraba una "obsesión" por ella y le había pedido en repetidas ocasiones iniciar una relación, a pesar de que ella no estaba interesada. En ese día, cuando Valeria salió del departamento, Passarella se acercó, sacó un arma de fuego calibre 9 milímetros y la mató con tres disparos.
Luego, se dirigió a su vehículo y, aproximadamente a una distancia de 150 metros, puso fin a su vida con un disparo.