En horas de la tarde de este jueves, lo que parecía una toma segura del campus universitario de Olavarría se transformó en una “espera” hasta mañana viernes por la mañana, cuando una nueva asamblea (interclaustro) se definirá si hay toma o no.
En charla con Infoeme, el representante del Centro de Estudiantes de la Facultad de Ciencias Sociales, Severiano Barraza, expresó que la intención era “elaborar un plan de lucha estudiantil con las demandas a tomar y se colocó fuertemente el tema de la toma, teniendo en cuenta lo que pasa en Tandil” (con una toma que comenzó el martes por la noche pasado).
“Se debatió y se coincidió en la cuestión de llevarla adelante. No se pudo definir la modalidad”: es que la asamblea estaba dividida en dos: según Barraza por un lado “quienes queríamos llevar adelante la toma desde las 19 horas de este jueves”, y “los que preferían esperar para incluir a los docentes y no docentes, dado que era estudiantil solamente”. Si bien hubo participación de docentes y no docentes “e incluso adhirieron” la asamblea “no estaba planteado de esa manera”.
Finalmente, se definió que todo esto “se resolverá mañana desde las 10 en otra asamblea, interclaustros, para ver si se está el acuerdo o la mayoría de los presentes se define tomar el campus desde que termine la asamblea”.
Mientras tanto, “se definió aprovechar este tiempo y la mañana de mañana para pasar por las cursadas, sobre todo las de ingeniería que son más importantes y no están tan interpelados por la lucha, como para convocar y colocar esta medida como necesaria. La idea de la toma estaba y es apoyada y no se decidió la modalidad” reiteró el estudiante.
La decisión de posponer la toma es que “había cierto temor de que sea contraproducente. Que por no informar haya estudiantes y docentes que estén en contra y sea perjudicial para la lucha estudiantil”.