El informe preliminar de la autopsia practicada a Lucila Carli, la joven de 22 años que fue hallada sin vida este domingo por la mañana en el arroyo Tapalqué tras una intensa búsqueda desde la tarde del sábado, confirmó como causa de muerte la “asfixia por sumersión”.
Así lo indicaron fuentes judiciales a Infoeme quienes anticiparon que el estudio no permitió determinar si previamente la joven sufrió un ataque de epilepsia – trastorno que padecía- por tratarse de un cuadro neurológico.
Otro dato importante surgió tras el cruce de testimonios – durante el sábado hubo versiones encontradas- y es la ubicación de la víctima dentro de un Kayak. Se cree que la mujer se habría arrojado repentinamente, hecho que originó un brusco movimiento e hizo girar el bote, provocando que su padre la perdiera de vista.
Además se supo que el cuerpo fue hallado a unos quince metros de la franja rastrillada el sábado, recostado sobre un socavón de lado izquierdo del arroyo, tras el aporte de uno de los testigos y el gran trabajo del grupo de buzos Bigúa de Bomberos Voluntarios.
El hecho aún permanece caratulado como “Averiguación causales de muerte” a la espera del resto de la documentación pertinente con intervención de la UFi 19 a cargo del fiscal Christian Urlézaga.