Finalmente y después que la pelea comenzaba a subir de tono, el presidente Mauricio Macri recibirá este miércoles a Marcelo Tinelli. Se da en medio de la polémica que generaron las imitaciones del mandatario en el programa "Bailando por un sueño" y las críticas que el presentador sufrió en internet, dijeron fuentes oficiales, aunque algunos analistas no descartan que otro foco de conflicto haya sido la Asociación del Fútbol Argentino, en donde también el empresario y vicepresidente del club San Lorenzo sospecha que detrás de la intervención a la entidad por parte de la FIFA se encuentre "la mano" del jefe de Estado.
El encuentro entre ambos, que se conocen desde hace años, tendrá lugar en la residencia presidencial de Olivos, al mediodía, y el objetivo oficial sería bajar el tono de la controversia en torno a las imitaciones, que el Presidente aseguró recientemente le "satirizan de mala manera".
El origen de la controversia arrancó hace varias semanas con la parodia del mandatario a través del imitador platense Freddy Villarreal en el programa ShowMatch, uno de los más seguidos en la televisión argentina, en la que se satiriza con su forma de hablar y de expresarse incluso mediante disfraces y otros recursos escénicos. Uno de los sketch más comentados fue cuando el imitador salió con los pantalones bajados parodiando unas declaraciones que Macri había hecho en las que aconsejaba a los ciudadanos no estar en casa en invierno en remera (camiseta) o 'en patas' (descalzo) para ahorrar energía.
A esto se suman las afirmaciones de Tinelli, en vivo, durante el espacio, que se emite en horario de máxima audiencia, contra los aumentos en las tarifas del gas dictados por el Gobierno, y, del otro lado, las duras críticas que recibió por parte de usuarios en las redes sociales, lo que a su juicio fue una campaña impulsada por el macrismo.
No obstante, el jefe del Gabinete, Marcos Peña, recordó ayer en una rueda de prensa que ambos tienen una amistad de hace "muchos años".
"Queremos dejar claro que nosotros no tenemos ningún problema con el humor político y no tenemos ningún problema con él", añadió Peña al ser consultado por la prensa.