"Padecí un despido en 2012 por no querer aportar un diezmo", denunció María Fernanda Gil Prividera, ex empleada de Aerolíneas Argentinas.
"Los mails no eran burdos, pero invitaban a colaborar. En un mail no te escribían: 'si no colaborás te quedás sin trabajo, pero te lo decían'. Te invitaban, insinuando, la participación como 'compañeros' con un léxico militante", manifestó.
Si no se cumplía, venían los diálogos en el aeropuerto. Prividera, la segunda denunciante en pocas horas contra la gestión en la aerolínea de bandera, señaló: "Hernán Pascua era un militante de La Cámpora, y era el encargado de recolectar el diezmo".
Hicieron de Aerolíneas una caja de militancia. A su vez, enfatizó: "Hago responsable al Señor Mariano Recalde. Escucharlo hablar de corrupción me da asco".
Fuente: Télam