La selección argentina quiere más. Luego de haber dejado en el camino a sus tres rivales en el grupo D y a Venezuela, con goleada incluida, en la instancia de cuartos de final, el elenco de Gerardo Martino buscará esta noche la final de la Copa América Centenario. Enfrente, la esperanza de los locales, Estados Unidos, de la mano del alemán Jürgen Klinsmann.
El equipo nacional irá por la tercera final consecutiva de un certamen internacional
Luego de los golpes sufridos en el último encuentro del Mundial de Brasil y la Copa América de Chile buscará revancha desde las 22 en el NRG Stadium de la ciudad de Houston, estado de Texas, con arbitraje del paraguayo Enrique Cáceres.
Además de la de Di María, que se repone de una lesión sufrida en el segundo partido ante Panamá, la única ausencia con respecto al encuentro frente a Venezuela es la de Nicolás Gaitán, que llegó a la segunda amarilla. En su lugar, entraría Ezequiel Lavezzi, aunque esto no fue confirmado
Lionel Messi lleva cuatro goles en lo que va del torneo y la selección 14 en sus cuatro encuentros, todos ganados (Chile 2-1, Panamá 5-0, Bolivia 3-0 en primera fase, además de Venezuela en cuartos).
De su lado, el local buscará dar un golpe histórico que lo coloque en el duelo decisivo del próximo domingo en Nueva Jersey ante el ganador de Colombia y Chile, que se enfrentarán el miércoles. Irá por su tercer triunfo seguido luego de vencer a Costa Rica (4-0) y Paraguay (1-0) en la fase inicial, remontando la derrota inicial ante Colombia (2-0).
El historial es muy favorable a la albiceleste, con cinco victorias, dos empates y dos derrotas. Pero en la Copa América están igualados con un triunfo por bando: los yanquis golearon 3-0 en la primera ronda de Uruguay 1995, los nuestros se impusieron 4-1 en la misma fase en Venezuela-2007.
Mientras que Argentina llega con dos días menos de descanso, los locales sufrirán tres bajas importantes: Jermaine Jones por expulsión y Alejandro Bedoya y Bobby Wood acumulación de tarjetas amarillas. Entrarían Graham Zusi, Kyle Beckerman y Darlington Nagbe en sus lugares.
Argentina parte como amplia favorita, por peso individual, colectivo y por su historia. Los norteamericanos sueñan con torcer ese favoritismo y sorprender al mundo con un batacazo. La final del domingo espera por su primer protagonista.